NACIONALISMO ANDALUZ
Las personas con el paso de los años adquirimos la
creencia de que ya lo hemos visto casi todo. Pues bien, a los que así piensen
debo decirles que a mi entender están en un craso error. Creedme si os digo que
cada día aprendo algo nuevo.
Has hace poco, tenía la certeza de que los
nacionalismos o separatismos, como se quieran nombrar, se circunscribían a
Cataluña, País Vasco y en menor proporción, Galicia.
Y digo que tenía, porque hace poco he descubierto
uno nuevo, que yo creía definitivamente
finiquitado, dado sus resultados electorales, que poco a poco lo han ido
convirtiendo en un partido residual. Me estoy refiriendo al Partido Andalucista
seguidor del arabista Blas Infante, al que pomposamente le conceden el título
de padre de la patria andaluza. ¡Toma ya!
Resulta ser y de ahí viene mi asombro, que en una
tertulia de taberna, un militante de este partido a una pregunta que otro de los
presentes hizo sobre Abderramán III, que yo traté de aclararle, se descolgó
diciendo que Andalucía o Al Ándalus, para el caso es lo mismo, disfrutó de su
mayor época de esplendor y prosperidad durante el Califato de Córdoba, que tuvo
su final tras el advenimiento de los CASTELLANOS (sic), que son los que han
llevado a la ruina a Andalucía y por consiguiente a los andaluces.
Durante unos instantes, el silencio se hizo total,
yo no sabía donde mirar y hacía esfuerzos notables por contener mi cara de
cachondeo; porque además me encontraba ante un dilema: mi madre y todos sus
antepasados hasta donde yo sé, procedían de la baja Andalucía, por lo cual, mi
ascendencia me situaba en el bando arábigo.
De otra parte, mi familia paterna en principio
extremeña, sus raíces son leonesas, lo que me convierte en súbdito cristiano.
Ante esta tesitura mentalmente elegí el bando cristiano y se acabó la historia.
Hasta este punto hemos llegado por la irracionalidad
de la gente. Y todos parecen cortados por la misma tijera: son seguidores de
iluminados decimonónicos que querían hacerse una parcela en una parte de
España, lo mismo da una parte que otra.
Blas infante el padre de “eso” se vestía con una
chilaba y se dice había ingresado en la religión musulmana. Sus seguidores no
se hasta que punto le guardaran fidelidad, pero que nadie se extrañe si dentro
de poco, no celebramos el Ramadán de Andalucía.
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