Promocion personal en sociedad en el nacionalsindicalismo

PROMOCION PERSONAL EN SOCIEDAD EN EL NACIONALSINDICALISMO

1ª PARTE

Existe una constante que es lema para el nacionalsindicalismo: el trabajo y la honradez son el mejor título de dignidad civil.

Si partimos del proverbio hedillista de dar al trabajo la máxima consideración dentro de la sociedad, existe una constante que es inherente a esta definición: el trabajo y la honradez son el mejor título de la dignidad civil.

Consideramos que todo español tiene el deber de servicio en el trabajo y como consecuencia al contrario de la relación contractual del liberalismo, en el que el capital somete al trabajador a aceptar la injusta ley de la oferta y la demanda y en el socialismo, para el que la persona humana es un factor económico sin más, el nacionalsindicalismo le concede el derecho a obtener y ejercitar el trabajo que desee y que merezca por sus cualidades personales.

No aceptamos a los zánganos y convidados, ni se tributará la menor consideración a quienes no cumplan función alguna de servicio y aspiren a vivir a costa del esfuerzo de los demás.

Al merecer la mujer igual trato digno dentro de la nueva sociedad, no se guardará la mas mínima consideración con el rufianismo o la explotación sexual.

En cambio el deber de solidaridad humana obligará a todos a la asistencia, integración social y rehabilitación posible de los deficientes síquicos y físicos.

Es un objeto indeclinable conseguir, que toda persona pueda cumplir la función que merezca por su capacidad y esfuerzo y que nadie detente cometidos inmerecidamente o impida los desempeñe el mas idóneo. Y habrá que tenderse a que la sociedad se ordene con movilidad e intercomunicación y a que integre a todas las personas.

Considerando a la familia como la entidad natural de convivencia, será objetivo primordial la protección de todos sus componentes. Sin ser esto un impedimento para que cualquier español pueda desempeñar su trabajo en cualquier lugar de la geografía española, abandonando cualquier sentimiento tribal.

            Las instituciones y la propia estructura de la sociedad deberán adecuarse para permitir a todos los españoles, sin trabas ni discriminaciones, la promoción y acceso de cualesquiera niveles de saber, cultura, trabajo y servicio en condiciones de igualdad en oportunidades y medios. Rechazamos por injusto, la protección mafiosa y caciquil de los que ostentando el poder, desean constituir un ente de poder paralelo a costa del clientelismo.