miércoles, 25 de enero de 2012

reclamo nuestro lugar


RECLAMO NUESTRO LUGAR


De acuerdo con mi escala de valores, España y la Falange son  mis prioridades en cuanto a cariño y lealtad. Soy y me considero español y falangista y doy gracias a Dios por permitirme ejercer de ambas cosas.
Quizás este rasgo inherente a mi personalidad, se sume a mi deseo irrenunciable  para que, desde el nacionalsindicalismo, podamos establecer un modelo de sociedad que satisfaga las necesidades de los españoles.
Soy consciente de las dificultades que la empresa comporta. Es cierto. Pero no lo es menos que no podemos esperar a que la Providencia nos mande al líder carismático que aglutine en torno suyo a todos lo que aspiramos a llevar a buen puerto nuestro ideal, o esperemos complacientes desde nuestros lugares a que la destrucción de España y sus valores alcance un punto de no retorno.
En lo que atañe a la primera cuestión, el líder carismático, lo ha tenido la Auténtica desde hace muchos años. Caso distinto es que la persona llamada a ejercer ese liderazgo, no se encuentre con el estímulo necesario para enarbolar la bandera de la revolución necesaria y urgente que España necesita, porque capacidad, la posee de sobra.
La segunda opción, solo le puede satisfacer a los que piensan que la suerte está echada y que no hay solución. Craso error. Es ahora, ante el estado de ansiedad e indefensión que el pueblo español padece, cuando una idea nueva que por inédita, no es conocida por la mayoría, estoy seguro acogerían al principio con un poco de escepticismo y posteriormente con agrado.
Basta ya de soportar que unos indeseables sin mérito alguno y con un pasado nada ejemplar, sean los que con cinismo, pretendan facilitarnos la credencial para poder desarrollar normalmente nuestra actividad política. Yo me niego en rotundo. No estoy dispuesto a tolerar que un asesino como Carrillo, tenga la máxima consideración, y se nos niegue a los que mas hemos sido perseguidos con saña por uno y otro bando.

Sin justificar nada ni pedir perdón a nadie. Somos los que somos y representamos lo que representamos. La bandera está izada y por favor, los que no tengáis nada que hacer, no lo vengáis a hacer aquí. Necesitamos trabajadores cotidianos y nos sobran héroes esporádicos que a nada conducen. Y a todos los que nos dicen que estamos pasados de moda y que lo mejor es que nos volvamos a casa, con mucho afecto les digo: “Consejos no me deis, que equivocarme, se solo”

No hay comentarios:

Publicar un comentario